Es tiempo de regalos y tiempo de deshacerse en virtudes caritativas para con nuestro prójimo. Supongo que nuestra conciencia intenta limpiarse en estas fechas. Supongo que se da cuenta del poco tiempo que le queda para hacer un balance positivo del año. Tal vez quedarse con el último sabor de una buena acción, aunque sea la única en estos doce meses que expiran, hace sentir mejor a las personas. Luego todo comienza de nuevo. Como el amanecer. Cada día el sol muere en las entrañas del océano tiñendo de un carmesí anaranjado el horizonte. Y cada mañana vuelve a resurgir tras un escenario de luces malvas. Luego todo comienza de nuevo, y es fácil agarrar la mano del olvido para volver a ignorar a nuestra conciencia. Pero hay regalos que no se olvidan. Hay regalos que carecen del volumen material pero no por ello dejan de pesar. Hay regalos grandes que no se ven. Hay regalos que no se pueden palpar, pero se pueden sentir.
Fotografía del increíble Chema Madoz
Son esos regalos los que dan sentido a las cosas. Agarrar la mano del que está a tu lado y sentir su tacto. Sentir cómo se cierra en la tuya. Un mensaje que hace brillar los ojos. Un beso entre calles estrechas y frías. Una caricia inesperada que da calor. Una llamada sencilla, pero capaz de cambiar el ánimo. Una sonrisa... una sonrisa genial e increíble que ilumina la penumbra más aciaga. Una mirada especial. Un abrazo tierno y fuerte a la vez. Quizás no se puedan poner. Tal vez no sirvan para perfumarse. Y es muy probable que no se puedan leer o jugar con ellos. Pero esos regalos son los detalles que hacen que todo siga adelante. Son esas pequeñas cosas que mueven el mundo en la dirección correcta. Esos detalles envueltos en un papel de regalo invisible, que se evaporarán en el mismo momento de ser entregados. Se derretirán. Desaparecerán a simple vista. Volarán con la leve brisa que sople en ese instante. Pero esos detalles son los que permanecen aunque se desvanezcan, pues el minúsculo cordón que los sostiene, no se esfumará. Quedará siempre, para recordarnos que hay regalos, que hay detalles, que nunca se olvidan...
21 comentarios:
Y es lo que mueve el mundo.
Precioso, certero e invisible tu relato. Que nos pone negro sobre blanco la miseria humana y la realidad de corazones que laten al mismo son.
Es uno de esos regalos que hablas que penden de un hilo invisible pero irrompible. Hay que leerlo y gozar del don de la vida.
Antonio
¿Sabes, querido Ramsés, cuál es mi regalo cada mañana?: mi niño en la cama acurrucado con el calor que le da su padre. Hace tiempo que no me levanto todo lo temprano que acostumbro sólo por no quitarle ese calorcito.
¿Y sabes qué otro regalo me espera?: mi niña iluminando mi vida cuando nazca en febrero.
Por lo demás, creo que este año he convencido a todos mis Reyes Magos para que me regalen, exclusivamente, libros.
Un abrazo, querido amigo.
Que razón llevas con estas palabras amigo Ramses...además estos detalles son mas bien regalos de un valor incalculable.
Pero realmente estos detalles existen todos los días del año. Y aunque parezca un poco hipócrita, está genial que una vez al año exista una escusa para acordarte de todos los seres queridos que tenemos...y realmente pienso que los regalos materiales suelen enmascarar aquellos inmateriales que tanto anhelamos o somos incapaces de hacer el resto del año...puede ser un poco triste pero la sociedad actual no ayuda a que las cosas sean como debieran ser.
Un abrazo. Edward
"Una sonrisa... una sonrisa genial e increíble que ilumina la penumbra más aciaga".
...Y tu bien sabes de sonrisas querido Ram, tu bien sabes.
Un beso.
Muchas veces te regalan un perfume y no te gusta, pero ¿quién rechazaría un beso, un abrazo o un buen chiste?
Detalles que hacen la felicidad.
Un beso.
Detalles como esos, y otros como unos brazos que me sustentan y me ayudan a caminar, son los más valiosos que he recibido yo en estos últimos días del año.
Tu eres uno de esos detalles...
Un abrazo de tu madre, una canción que te transporta en el tiempo, una experiencia revivida en el Tremendo con los de siempre, una mirada, un paseo por mi Sanlúcar, un (1) en la bandeja de entrada...
Amigo, detalles que hacen que la vida valga la pena tengo para dar y regalar.
Pero sobre todo me quedo con las botas de fútbol de mi hijo llenas de barro, nunca me dió tanta alegría limpiarlas.
Un beso, artista.
Soy una persona que valora muchísimo esos detalles que te alegran el día, esos detalles que algunos siempre tienen con los de más.
Creo que tú, eres una gran persona rica en detalles querido Ram... no me cabe dudas.
Te deseo una feiz Navidad con la gente que te quiere, que no son pocas.
Amigo, mi regalo para tí y para todos es un regálo por entregas, 365 entregas, que al final del año que viene, me direis si os ha gustado o no. Así, cada una de las entregas es tratar a los demás como a mí me gustaría que me trataran. No olvidarnos de la conciencia amigo.
1BESP.
Detalles como esta entrada son un disfrute de leer, detalles de recibir y detalles que se multiplican si damos.
Tu presencia hoy en el programa ha sido el mejor regalo. Te mande el correo a la dirección que tienes en el blog pero como estaba en una foto y no pude copiar se me pasó el punto y claro no te llegó.
Espero que el sábado 27 de 13 a 16 horas tengas un ratillo y podamos compartirlo por la radio.
Eres grande Aguaó.
Sé que estoy saliéndome del tema, pero ¿para cuando una entrada sobre Chema Madoz? Lo digo porque con la de veces que me hablas de él y sacas sus fotos, me extraña que no le hayas dedicada una aún.
Preciosa entrada querido aguaó, es como la vida misma, lo que nos ocurre a muchos durante un año, pero yo prefiero esos pequeños detalles del día a día, esa llamadas aunque solo sean unos minutos antes de que me regalen algo por Navidad y hasta el próximo año no se acuerden de ti.
Muchos besitos
Eso es mostro!!!!!!!! El otro comentaba eso mismo con mis compañeros de trabajo (aquellos que nos llevamos bien, claro); esos detalles son los que te hacen tirar palante
Ay, esas pequeñas cosas; esas pequeñas y grandes cosas. Qué gran misterio. ¡Y no se compran ni se venden! Un abrazo.
Preciosa reflexión que unido a los comentarios de tus lectores recrean una postal de Navidad con un mensaje para tomar en cuenta en los propósitos característicos de esta época.
Felices Pascuas
y Próspero Año Nuevo 2009.
este año no hare un sólo regalo materioal, espero ser capaz de ser generosa en "detalles".
Te deseo lo mejor para estas fechas y para despues de ellas.
Un abrazo Antonia
Sin duda, esos son los mejores regalos y además no hay fechas para darlos.
Como dice Antonio, es lo que mueve el mundo. Y que no deje de moverlo nunca.
Un beso aguaó.
El mejor regalo es qe toque la lotería, pero la cosa va muy mal. Me gusta tu blog.
Esos detalles, mi querido Antonio, son los que dan sentido a las cosas. A muchas cosas.
Ambos detalles, mi querido Juanma, son motivos más que suficientes para seguir adelante.
Amigo EDward, debo confesarte que me encanta regalar. Me encanta observar la cara de la persona que recibe el presente y el gesto de su cara al descubrir el interior. Pero aún así... esos regalos de los que hablo en la entrada, nunca se deben olvidar. En todo el año.
Amigo Calleferia, tengo la suerte de conocer esa sonrisa que ilumina la penumbra más aciaga...
Tú lo has dicho mi querida Parsimonia, detalles que hacen la felicidad.
Queridísima Iglesia de Auvers, seguirán sin faltar esos detalles. Y sabes muy bien que son recíprocos.
Esa frae, mi querido Antonio, me ha emocionado. Sin palabras.
Muchos de esos puntos que has puesto, mi querida Dama, los he sentido como míos. En cuanto a esas botas llenas de barro... tú sabes, de buena tinta, que yo también me alegro mucho.
La gente que tengo alrededor, los buenos amigos y las buenas personas, como tú, mi querido Híspalis, me han enseñado lo que son los detalles.
Esa es la clave mi amigo Nefer, no olvidar aunque no haga frío ni haya luces en la calle.
Efectívamente amiga Zinquirilla. Muchas gracias por tus palabras.
Hablamos amigo Juan, y concretamos. ¿Grande yo?, yo no soy el que ha creado una radio en su blog con sus propios medios y ha triunfado... grande tú.
Todo se andará mi querido Ludwig, aunque el gran Chema sirve mucho como inspiración y apoyo con sus fotografías. ësta es la prueba.
Otra buena pieza a tener en cuenta: el día a día. Muy buen tino querida Sevillana.
Siempre de frente, que diría el capataz de mi querida Madre del Mayor Dolor y Traspaso amigo Finidiblanco.
Eso es lo mejor: ni s ecompran ni se venden amigo Carlos RM. Me alegro de verte por aquí.
Igualmente amiga América, Felices Pascuas.
Al fin y al cabo, amiga Antonia, son los detalles los que no se olvidan.
Sin fechas, otro secreto querida Zapateiro.
Quizás la lotería te toque cualquier día querido Dtordable, tan sólo hay que abrir los ojos. Bienvenido a este humilde puesto del agua. Esta es tu casa.
Un fuerte abrazo a todos.
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